El pie de atleta, también conocido como tinea pedis, es causado por una infección por hongos conocida como tinea cruris. Esta afección se produce debido al cuidado inadecuado de los pies y al calzado, así como a las malas prácticas de higiene personal. Cuando se presentan los síntomas del pie de atleta, puede ser difícil de tratar porque se puede propagar de un paciente a otro y causar infecciones en otras partes del cuerpo.
La infección por hongos puede transmitirse de persona a persona al rascarse y frotarse la piel
Para tratar la propagación de hongos, asegúrese de que las superficies del baño se limpien con regularidad y que la ropa de los pies esté siempre seca antes de usarla. No use zapatos o sandalias mojados o húmedos cuando salga al aire libre. Mantenga los zapatos o calcetines en cuartos de almacenamiento secos lejos de la luz solar directa para que los hongos no puedan crecer en ellos.
Cuando tiene síntomas de una candidiasis, necesita saber qué hacer. Lo primero que debe hacer es consultar a su médico. Para afecciones más graves, es posible que un especialista deba examinar su pie. Una vez que se realiza la prueba, puede diagnosticar adecuadamente una infección por hongos y tratarla en consecuencia. Una vez que sus síntomas se hayan diagnosticado y tratado correctamente, su médico le recetará los medicamentos o el tratamiento adecuados.
Dependiendo del tipo de candidiasis, encontrará diferentes tratamientos para el pie de atleta. Estos incluyen ungüentos, cremas, tabletas orales e incluso cirugía. Si su candidiasis es más grave de lo habitual, es posible que necesite la ayuda de un dermatólogo o podólogo. Sin embargo, es mejor buscar ayuda y tratamiento inmediatos para evitar infecciones secundarias. Mientras tanto, no se rasque ni se desprenda el área afectada.
Si le han diagnosticado pie deportivo, cámbiese de calzado inmediatamente y tome las medidas necesarias para prevenir la propagación de la infección por hongos. Los calcetines de algodón en lugar de poliéster mantendrán tus pies secos. Es importante secar bien los pies después del baño. Las formas más comunes de secar y curar el pie de atleta son las cremas y ungüentos para pies.
El pie de atleta también puede tratarse asegurándose de limpiar regularmente el área afectada con agua tibia. y jabón antibacteriano. El área infectada nunca debe estar mojada. Si usa algunos de estos medicamentos, no los comparta con ningún otro paciente.
Además de asegurarse de seguir un cuidado simple de los pies, también debe evitar usar calzado demasiado ajustado. El calzado apretado dificulta la respiración y la respiración de los pies y causa irritación. El uso de zapatos ajustados que no permitan que entre aire también contribuirá a la infección y la incomodidad.
Use calcetines y sandalias cómodos siempre que sea posible
Seguir unos sencillos pasos para eliminar el pie de atleta puede proporcionar alivio. Todo lo que tienes que hacer es asegurarte de cuidar tus pies y cuidarlos bien. Si su afección parece difícil o si tiene un dolor constante, comuníquese con un médico para obtener ayuda.
Una buena higiene de los pies es una parte fundamental para prevenir el pie de atleta. De hecho, esto es muy útil para prevenir la propagación del hongo y la infección. Esto evitará que tenga una infección por hongos y una condición dolorosa causada por el pie de atleta. Puede comenzar lavándose bien los pies antes de vestirse y también puede lavarse los pies después de la ducha.
Se pueden aplicar cremas y ungüentos para los pies cuando se bañe o se duche. La crema para pies debe aplicarse al menos 15 minutos antes de irse a dormir. Otra forma de asegurarse de que sus pies estén sanos es usando calcetines de algodón y evitando los zapatos que tengan demasiados tacos. en las suelas. Estos pueden ayudar a prevenir la propagación de los hongos.
Cuando tiene una infección por hongos o pie de atleta, el hongo crecerá muy rápido. La infección también se propagará fácilmente al rascarse y frotarse. Si sus pies están constantemente mojados, los hongos crecerán en el agua. Por lo tanto, mantenga los pies lo más secos posible al bañarse y no coloque nada más en los pies ni en la zona afectada.
No se raye con los pies sucios. Si sus pies siempre están mojados, los hongos pueden crecer fácilmente e infectar otras partes del cuerpo. Para la prevención, use calcetines y zapatos hechos de algodón, lana o seda para mantener sus pies limpios y secos. El uso de zapatos mojados, como chanclas, también puede propagar el hongo a otras partes del cuerpo.
Facundo Arias – сardiólogo con 15 años de experiencia.
Educación:
- Residencia en Cardiología
- Grado de Doctor en Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)
- Certificación en Soporte Vital Cardiovascular Avanzado (ACLS)
Educación Continua:
- Participación como ponente en la Conferencia Anual de Cardiología sobre “Avances en la Salud Cardíaca”
- Asistencia a talleres sobre “Innovaciones en Cardiología Intervencionista”
- Completó un curso avanzado sobre “Imagen y Diagnóstico Cardiovascular”
Experiencia Profesional:
- Jefa del Departamento de Cardiología en el Hospital Ciudad (2010 – Presente)
- Cardióloga en la Clínica de Cuidado Cardíaco (2005 – 2010)
- Fellowship en Cardiología Intervencionista en el Instituto Nacional del Corazón (2003 – 2005)
- Internado Médico en el Hospital General (2000 – 2001)
Acerca de Mí:
Como cardiólogo comprometida, me especializo en diagnosticar y tratar una amplia gama de enfermedades cardíacas, incluyendo enfermedad de las arterias coronarias, arritmias, insuficiencia cardíaca e hipertensión. Mi experiencia también incluye realizar procedimientos intervencionistas como angioplastias y colocación de stents. Con un fuerte compromiso con la atención al paciente, mi objetivo es proporcionar planes de tratamiento personalizados que prioricen el bienestar de mis pacientes. He escrito varios artículos en revistas médicas de renombre y he sido ponente destacada en numerosas conferencias de cardiología. Mi objetivo es contribuir al avance de la atención cardiovascular a través del aprendizaje continuo y la excelencia clínica.
